
Proteger nuestra naturaleza es un compromiso constante.
Con la compra de predios, estamos ampliando las áreas protegidas y reforzando la conservación de nuestra biodiversidad.

Cada hectárea adquirida significa más oportunidades para restaurar, conservar y proteger nuestros recursos naturales. Un Risaralda más verde es posible gracias a la acción decidida de todos
